No hay nada más emocionante que la cara de un niño disfrutando de un truco de magia, ¿verdad? Sin embargo, a medida que va pasando el tiempo y nos convertimos en adultos, cada vez es más difícil sorprendernos.
No obstante puede que el truco que vengo a contaros hoy, que no es otra cosa que un experimento con una base científica, consiga dejar a vuestros invitados sin palabras. Y es muy probable que consigáis despertarles esa admiración que seguramente daban por perdida con su niñez. Asimismo, el truco dejará a los niños de la casa patidifusos y seguramente les encantará.
Pero antes, dejadme que os cuente qué es lo que vais a necesitar para realizarlo:
Lo mejor de todo es que son elementos que podemos encontrar en cualquier casa, por lo que no tendréis que gastaros ni un céntimo. Dicho esto, veamos qué tenéis que hacer. Es muy sencillo:
Fácil ¿verdad? ¡Estamos deseando saber cómo os ha ido el truco y las caras de todos aquellos a los que se lo habéis mostrado!
Este artículo fue modificado el 7 enero, 2019 5:08 pm