Quien tiene un amigo tiene un tesoro, esto es lo que suele decir. Lo que pasa es que, a veces, ese tesoro desaparece como si se tratara del anillo único y claro, a los demás nos toca hacer el papel de Gollum e ir a buscarlo.
No nos engañemos, todos tenemos o hemos tenido un camarada que, de la noche a la mañana, parece que ha desaparecido de la faz de la Tierra. Una vez descartados posibles secuestros y abducciones alienigenas nos queda un 90% de posibilidades de que el motivo de su ausencia prolongada se deba a que se ha echado novia. Si, ya se que esta situación os resultará tremendamente familiar, que la habéis vivido en alguna, o algunas ocasiones en vuestras vidas, y que no habéis sabido como conseguir que ese preciado amigo vuelva a dedicaros un mínimo de tiempo.
Hoy os traemos una historia a y a la vez un método para poner arreglo a esta situación, con el mayor sentido del humor posible, por supuesto.
Esta es la historia de Keiran Cable, un joven galés de 20 años que hace 18 meses encontró el amor en su actual novia Jess Ferguson, de 19 años. Esta situación tan normal y llena de alegría tuvo unos efectos colaterales que afectaron a sus amigos.
Parece ser que desde el mismísimo momento en el que Keiran inició su relación sentimental no volvió a tener tiempo para quedar con ellos. En un afán de llamar su atención, decidieron hacer una fiesta en su honor un tanto atípica.
Consiguieron reunir a 50 amigos de Keiran para celebrar un funeral ficticio y poder así pasar un rato con su, antiguamente, compañero de correrías.
Si quieres saber cómo fue todo aquí misto te dejamos unas cuantas fotos para que veas con qué sentido del humor se desarrolló todo el evento.
Fuente: Elite Daily