Probablemente penséis que tenemos un serio problema con los postres llamativos y que entran inmediatamente por los ojos. Y así es: nos encantan.
Así pues, cuando nos topamos con esta deliciosa receta de plátano y crema de caramelo, no nos lo pensamos dos veces antes de compartirla con vosotros. Además, no me negaréis que son el postre perfecto para sorprender a alguien muy especial 😉
Al verlo, puede que penséis que es muy elaborado y que podría llevaros demasiado tiempo, pero nada más lejos de la realidad. Creedme cuando os digo que el resultado merece la pena.
Antes de empezar a preparar esta delicatessen, veamos primero qué ingredientes vais a necesitar:
Para la base de galletas
Para la crema pastelera de vainilla
Para montaje del postre
Crema pastelera de vainilla
Base de galletas
Montando el postre
1. Pon dos cucharadas de base de galletas en cada vasito. utiliza un vaso pequeño para aplastarla, tal y como se ve en la imagen
2. Después añade una capa de crema pastelera y tres rodajas de plátano.
3. Luego añade una capa de nata montada (ayúdate, si lo prefieres, de una manga pastelera), unas virutas de base de galletas y un chorreoncito de dulce de leche o crema de caramelo.
4. Repite con una capa de crema pastelera y, para finalizar, una capa de nata montada, acompañada de unas cuantas virutas de galleta, un chorreón de dulce de leche y una rodaja de plátano para decorar.
¡Bon appétit! 🙂
Vía: gloriousstreats
Reconozcamos que gran parte del mérito de un postre, sin menospreciar la mano de obra y el sabor, reside en su presentación. Por ello, el recipiente donde lo pongamos también juega un papel crucial.
Y hoy precisamente vamos a enseñaros a fabricar un recipiente para postres que, además de hermoso y creativo, ¡es comestible!
Lo único que vas a necesitar para estar receta es:
Cuando lo tengas todo, lo único que tienes que hacer es poner el agua a fuego medio-alto, añadirle el azúcar y el jarabe de maíz y dejar que hierva a unos 150ºC. Cuando alcance esta temperatura, opcionalmente podremos añadirle chispas de colores o colorante.
Después vierte la mezcla sobre un globo de agua y deja que se enfríe durante 10 minutos. Transcurrido el tiempo, conseguiremos un cuenco comestible para servir un helado o unos profiteroles, por ejemplo, de una manera súper creativa.
En el siguiente vídeo podrás ver todo el proceso que te acabo de explicar. Pruébalo y nos cuentas
Este artículo fue modificado el 26 septiembre, 2019 7:21 pm