Según un estudio, las canciones que escuchamos de jóvenes nos acompañan durante toda la vida

Publicado 16 julio, 2020 por Pablo Carrera
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Para muchos de nosotros, hay ciertas melodías que tienen el poder de transportarnos instantáneamente al pasado. Según un estudio, las canciones que escuchamos de jóvenes nos acompañan durante toda la vida.

La música es una de las expresiones más asombrosas del ser humano. Permite expresar miedos, alegrías o sentimientos muy profundos. Podemos canalizar emociones complicadas, aliviar las penas y animar el día.

La música de nuestra juventud no la olvidamos nunca

Según una publicación inglesa, aquello que nos gusta musicalmente entre los diez y los treinta años ayuda a proteger a nuestros recuerdos de la desaparición.

La investigación fue llevada a cabo por la Universidad de Westminster y utilizó datos del programa de radio más antiguo de Gran Bretaña. Este pregunta a diversas personalidades qué canciones se llevarían a una isla desierta.

El equipo descubrió que los participantes solían elegir aquellos temas que habían sido importantes para ellos en su juventud. Esto se conoce comúnmente como «golpe de reminiscencia» o «período de autodefinición», ya que se produce en un momento en el que desarrollamos nuestro sentido de quienes somos.

La profesora Catherine Loveday, investigadora principal del estudio, comentó que los invitados eligen con frecuencia canciones relacionadas con momentos significativos de su adolescencia.

También destacó que, a diferencia de otros trabajos, este se llevó a cabo en un entorno natural donde los sujetos no estaban condicionados por un espacio experimental. De esta forma, han tenido control total y libertad sobre sus elecciones.

¿Por qué son estos recuerdos tan importantes y duraderos?

A nuestro cerebro le gusta procesar experiencias nuevas y emocionantes antes que las aburridas.

En los años de formación tomamos muchas decisiones cruciales, iniciamos relaciones serias y establecemos las creencias culturales y políticas que forman nuestra identidad. Durante este período comenzamos a construir lo que nos acabarán definiendo.

Cuando se le pregunta a alguien sobre la música que es valiosa para ella, suele escoger melodías asociadas con situaciones, lugares y personas destacadas, un viaje lejos de casa, o un momento de autodescubrimiento.

Un fenómeno que también se aplica a la música clásica

Sabemos relativamente poco sobre la medida en que el «golpe de reminiscencia» se aplica a la música clásica. En parte porque casi toda la investigación se ha centrado en el pop.

Muchos fans de los grandes clásicos son expertos en la materia: ¿Sus preferencias se producen por asociaciones con su juventud? ¿O es más probable que se guíen por juicios objetivos?

Según parece, unos oyentes más exigentes se sienten igualmente atraídos por los temas que escucharon siendo jóvenes.

Los científicos ha localizado un área específica del cerebro, la corteza prefrontal media, que conecta los recuerdos y las emociones con piezas musicales específicas. Entonces, ya seas Mozart, Elton John o Taylor Swift, algo está claro: la música es un camino que nos une de por vida con instantes y personas a las que amamos.

Cualquier excusa es buena para desconectar de la realidad y dejarnos llevar por las canciones que nos acompañan toda la vida: Van con nosotros a todas partes y nos conectan con quienes somos.

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