Cómo hacer una mochila con una bolsa del IKEA

Publicado 4 diciembre, 2019 por Vanessa P.
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Todos vamos a necesitar en alguna ocasión tener una mochila impermeable, sobre todo si somos aficionados a los deportes de montaña, si vamos a la playa o a la piscina, o si vivimos en un lugar en el que llueva con frecuencia. ¿Qué mejor manera de obtener una que haciéndola nosotros mismos por el módico precio de 15€? Utilizando unas bolsas del IKEA puedes fabricarte una mochila en casa y regalarla o guardártela para ti, e incluso un impermeable para tus hijos

A continuación te damos los datos necesarios sobre los materiales que necesitarás utilizar, los patrones que deberás seguir y los pasos que llevarás a cabo para crear una preciosa mochila, ideal para la aventura, para el invierno y para todo tipo de ocasiones que se presten.

Tardarás alrededor de dieciséis horas en tenerla hecha por completo, así que deberás tener paciencia y tener mucho cuidado con los detalles para que quede perfecta. Pero no desesperes, el empeño que le dediques valdrá la pena.

Material para tu mochila IKEA

  • Bolsas azules del IKEA
  • Una cremallera metálica
  • Hilo de nylon
  • Correas de nylon
  • Relleno de fibra de poliéster (como el que se usa para rellenar peluches y almohadas)
  • Tela antidesgarros rip-stop de nylon
  • Tela de nylon para crear un forro interior (opcional pero recomendable)

Instrucciones

  1. Corta las bolsas siguiendo sus propias costuras para crear paneles grandes y así aprovechar la mayor parte de la tela disponible.
  2. Cose la cremallera a la parte frontal, y adjunta los dos lados.
  3.  Ve incorporando correas con las letras de IKEA al diseño, colocándolas en el frontal o cosidas a los lados. Esto le dará un toque muy original.

4. Acolcha la zona posterior con un panel grande de lona de la bolsa IKEA, el relleno de poliéster y una capa de nylon antidesgarros para amortiguar la espalda. Esto aumentará la durabilidad de la mochila.

5. Cose las correas de nylon a la tela antidesgarros para que no se rompan con el peso que lleves dentro de la mochila.

  1. De modo opcional, puedes usar tela de nylon para crear un forro del mismo tamaño que la mochila y coserlo a su interior. De esa manera quedará más protegida.
  2. Asegúrate de que la mochila ha quedado bien cosida y rematada, sobre todo en la parte de abajo y en las correas. De lo contrario podría caerse todo lo que guardes en ella, o incluso romperse la propia mochila.

8. Por último, solo te queda decorarla y reforzarla a tu estilo. En esta ocasión se han añadido detalles naranja neón a juego con la tela rip-stop, un asa superior para poder llevarla en la mano, un refuerzo de correa en la espalda y un cierre que hace que la mochila tenga más capacidad.

Una vez completamente terminada, solo te queda disfrutar de ella y llevártela contigo adonde quieras. Recuerda que cuantas más bolsas uses, y más grande sea la mochila, más cosas cabrán dentro. Esto te será ideal si viajas mucho o te gustan los deportes de montaña.

El patrón que se siguió en esta ocasión para la mochila que acabamos de mostrar fue el siguiente, de Noodlehead Designs.

¡Varía el diseño y fabrica una mochila única tú mismo!

Echándole un poco de imaginación, puedes crear otros diseños de mochila, como la siguiente. Se trata de una mochila ultraligera ideal para llevar de senderismo por su gran capacidad y su resistencia al agua.

En concreto, en esta mochila caben tantas cosas que podrás meter hasta cuatro kilos de peso en contenido. Suficiente para ir a cualquier parte. Además de espaciosa, es muy cómoda y por su forma es perfecta para caminar con ella a la espalda.

Es muy fácil de hacer, incluso más que el modelo anterior, aunque todo dependerá del nivel de detalles que quieras incluir.

Al fin y al cabo, la gracia de las manualidades es que utilices también tu propio ingenio. Además de tomar nota de estas ideas, podrás añadir tú otros detalles, refuerzos, bolsillos, decoraciones, crear tu propio patrón… O incluso hacer tu mochila con bolsas de lona que no sean de IKEA. Lo que sí te recomendamos es que utilices una tela resistente y que tengas mucha paciencia, es fácil que en la primera ocasión el resultado no sea perfecto. ¡Manos a la obra!

 

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