Ogimi: el pueblo que tiene el mayor índice de longevidad del mundo y su secreto para conseguirlo

Publicado 17 septiembre, 2020 por Pablo Carrera
ogimi
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No todas las aldeas son iguales pero todas tienen algo especial. Es el caso de Ogimi, el pueblo japonés que tiene el mayor índice de longevidad del mundo.

En este sitio, situado en la isla de Okinawa, viven personas centenarias que parecen sentirse eternamente jóvenes. La ausencia de enfermedades crónicas y una vida saludable parecen ser la causa de esta situación.

Los secretos de este lugar de oriente son muchos y se pueden aplicar a nuestra vida. Te desvelamos algunos de los más relevantes:

La resiliencia por bandera

Se denomina así a la capacidad de adaptación frente a los reveses del destino. Con esta actitud se consigue mantener el foco en el objetivo final y evitas que las cosas que te rodean te desvíen.

Cuando fueron ocupados durante la Segunda Guerra Mundial, decidieron no dejarse llevar por el odio y no le guardan rencor a los invasores.

Esta forma de entender el mundo reduce el estrés, las preocupaciones y mantiene el corazón alegre.

Ejercicio constante y en pequeñas dosis

Ellos practican dos tipos de actividad física: la obligatoria y la voluntaria.

En el pueblo hay mucho trabajo agrícola, con lo que se vuelve una labor ineludible, especialmente entre personas mayores. Además, Okinawa es la única provincia de Japón que carece de trenes, así que tienden a caminar mucho.

Por otra parte, es habitual practicar gimnasia. Desde antes de la guerra, es común realizar ejercicios de calentamiento matutino. Muchos los realizan en sus casas siguiendo las instrucciones que se emiten por radio o televisión. Estas rutinas de estiramientos duran de cinco a diez minutos y refuerzan el espíritu de cooperación.

En este estudio hicieron un seguimiento a varias personas durante 11 años. De esta forma analizaron la relación entre la frecuencia del ejercicio físico y la longevidad.

Un estrecho vínculo con la naturaleza y los vecinos

Para los habitantes de Ogimi, es muy importante cuidar la conexión que mantienen con el entorno.

El trabajo con el huerto no es solamente para mantenerse en forma o alimentarse, también es una manera de sentirse conectados con lo que los rodea.

El cooperativismo es muy habitual y la mayoría de las actividades funcionan a base de voluntariado.

También existen los moai, grupos de gente con intereses comunes. Pagan una cantidad mensual y con eso organizan todo tipo de eventos.

La dieta de Okinawa: equilibrada y sana

Uno de los puntos más importantes es el relacionado con la alimentación.

Tratan de mantener un bajo índice en azúcares y sal, de hecho es la provincia japonesa con menor consumo. Comen una gran variedad de alimentos, unos 206 de media, y preparan la comida en varios platos pequeños en vez de usar uno grande. Mucha fruta, verdura y antioxidantes son partes fundamentales de esta dieta.

Todo esto se ha analizado y medido en este detallado estudio. En él se explica de manera científica el patrón dietético.

La razón para levantarse por la mañana: el ikigai

Dicen los ancianos del lugar que lo más importante de todo es tener un propósito en la vida, una razón de ser.

Precisamente por este tipo de cosas, los okinawenses más ancianos no cesan sus actividades cuando se jubilan. Ellos prefieren seguir en movimiento.

Esta actitud está íntimamente relacionada con la idea de fluir, uno de los puntos claves para experimentar el ikigai.

Si tu vida tiene un sentido, merecerá la pena vivirla. Esta parece ser la idea fundacional de esta filosofía.

Muchos se han interesado por este modo de vida y se han escrito estudios sobre él para entenderlo mejor.

De momento este pueblo japonés seguirá fiel su estilo de vida y mantendrá su longevidad muchos años. Esperamos que estos trucos te ayuden a llevar una vida más saludable.

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