El gato es el animal de moda en internet. Ampliamente perseguidos durante la Edad Media por su supuesta relación con las brujas y demonios, estos felinos se han convertido en la mascota por excelencia con la llegada de internet.
Y es que todos los que tengáis un gato como compañero de hogar sabréis lo graciosos, únicos y peculiares que son. Cariñosos cuando ellos quieren y un poco huraños si la situación lo requiere.
No hay dos gatos iguales, eso se lo podemos preguntar a cualquiera que conozca su carácter, pero lo que sí tienen en común es una serie de comportamientos muy característicos de su especie.
El más común y que enseguida reconocerán los amantes de estos animales, es el «amasado». Cuando a un gato le parezca bien, empezará a mullir tu cuerpo (o el de alguien cercano) con sus patitas delanteras alternativamente.
Es como una especie de masaje que puede ser muy agradable, siempre y cuando nuestro peludo amigo no saque las uñas. Pero, ¿por qué lo hacen?, ¿cuál es su propósito?
Si alguna vez te has preguntado el porqué de este peculiar comportamiento, aquí vamos a solucionar esta cuestión, o por lo menos, vamos a intentarlo.
Mi gato me «amasa» y no sé por qué lo hace
Empezaremos diciendo que son dos las posibles respuestas que nos dan los zoólogos, aunque las dos tienen mucho que ver con el afecto que puede tener el animal hacia nosotros.
La primera explicación tiene que ver con el período lactante del felino. Cuando son cachorros, los gatitos presionan alrededor del pezón de sus madres para que salga más leche.
Al alcanzar la edad adulta esta costumbre no se pierde y tienden a hacerlo cuando se encuentran a gusto y despreocupados. En muchas ocasiones acompaña el mullir de una succión, como si regresase a su infancia felina, pero esta vez, sus madres somos nosotros.
La segunda explicación tiene que ver con las feromonas que producen estos animales. En las almohadillas de sus patas, los gatos tienen unas glándulas especiales encargadas de la producción de feromonas. Al amasar a cualquier persona o animal lo que están haciendo es impregnando con su olor al individuo. Esto es una señal distintiva de que ese perro, humano o cojín tiene un gato que lo reclama como parte de su familia.
Así que recordad, tanto si es por sus recuerdos maternos como si lo hacen por impregnarnos con su olor, el amasado de un gato es una manifestación de sus sentimientos más tiernos hacia nosotros.
Fuente: Fishki, Artículo traducido y adaptado por La voz del muro
