4 cosas que nunca debes decirle a un vegano

Publicado 3 marzo, 2020 por Javier Escribano
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Ser vegano puede ser complicado. Y no por falta de opciones para comer, dificultad para encontrar los ingredientes o problemas de salud, sino por los prejuicios y comentarios de muchas personas, que juzgan y comentan, aunque sea sin mala intención, desde el desconocimiento. Si quieres evitar caer en el tópico, apúntate estas claves que deberían responder todas tus dudas.

Ser vegano es caro

Uno de los mitos más dañinos que se ha extendido sobre el veganismo es que es caro. No solo caro, también que es una moda hípster, posmoderna y elitista, inalcanzable para la gente de a pié. Culpa de ello la tienen ciertos productos vegetales procesados, muchos de ellos empeñados en copiar en forma vegana alimentos cárnicos como hamburguesas y quesos, y popularizados en supermercados y restaurantes tirando a pijos. Estos productos, que parecen haber monopolizado la conversación sobre el tema, no son, en ningún caso, la base de la dieta vegana, y su consumo no es diferente al de sus correspondientes en dietas omnívoras: caprichos de los que conviene no abusar por nuestra cartera y nuestra salud.

La cesta de la compra de un vegano se compone principalmente de frutas, verduras, legumbres y frutos secos. Alimentos que además de ser comunes y baratos, no tendrían ni que ser sujetos a comparación, pues también deberían ser la base de cualquier dieta, contenga o no carne. Es solo aproximadamente la cuarta parte de una dieta saludable lo que cambia entre veganos y no veganos. Y productos ricos en proteínas como las legumbres, los frutos secos, el seitán o el tofu son comunes en prácticamente cualquier supermercado, a precios iguales o incluso más baratos que las carnes, huevos o pescados.

En definitiva, gastar más o menos en la cesta de la compra depende de nuestras costumbres y conocimientos culinarias y nuestro compromiso por llevar una dieta sana sin muchos excesos, sin que el ser vegano tenga nada que ver.

Provoca problemas en la salud

Ser vegano no es perjudicial para la salud. Al igual que tampoco es perjudicial llevar una dieta equilibrada que sí incluya responsablemente carne y pescado. De nuevo, no es cuestión de veganismo o no, sino de procurar una alimentación equilibrada, que cubra todas las necesidades de nuestro organismo…  y eso incluye algunos nutrientes encontrados principalmente en los alimentos de origen animal.

Es el caso principalmente de las proteínas, vitales para el organismo por contener aminoácidos esenciales para el funcionamiento de nuestros músculos, piel, órganos y sistema inmunológico. Generalmente, las proteínas vegetales contienen menos aminoácidos esenciales (aminoácidos que el cuerpo no puede producir por sí solo) que las animales, pero esto es fácilmente solventable con una dieta que utilice muchos alimentos ricos en proteína.

Platos que combinen quinoa, legumbres, tofu, frutos secos, alforfón (un tipo de trigo), avena y  arroz integral con verduras ricas en proteínas como espárragos, aguacate, espinacas, brócoli o coles de bruselas son suficientes para obtener la dosis recomendada. Además, tienen la ventaja de contener menos grasas saturadas que las proteínas animales, lo que disiminuye el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares.

El calcio, encontrado principalmente en la leche y sus derivados y fundamental para el mantenimiento de los huesos, es otro nutriente fácilmente sustituible con alimentos como soja, brócoli, espinacas, endibias, frutos secos, semillas o garbanzos.

Dicho esto, una alimentación que excluya carnes y grasas y que no descuide los puntos antes mencionados suele significar en numerosos beneficios para la salud, como reducción de niveles de colesterol y presión arterial, menor riesgo de sufrir diabetes tipo 2, enfermedades del corazón y algunos tipos de cáncer y, en general, pesos más adecuados.

Tendrás déficit de vitamina B12

El caso de la vitamina B12 es más complicado, pues es el único nutriente que solo se encuentra en alimentos de origen vegetal. Por esa razón, los veganos son más propensos a sufrir de déficit de esta vitamina, que puede derivar en enfermedades cardiovasculares y cerebrovasculares.

Sin embargo, este es otro problema es que es fácilmente evitable consumiendo alimentos, especialmente cereales y leches vegetales, que tengan suplementos de esta vitamina (buscadlos en las etiquetas cuando vayáis de compras). También es recomendable consultar con el médico o el nutricionista, y si es necesario consumir suplementos de vitamina B12, que es algo perfectamente corriente.

Ser vegano es aburrido

Está más que demostrado que jugar bajo una serie de normas y limitaciones, lejos de cercar nuestra imaginación, la estimula y expande. Esta máxima se puede aplicar a casi cualquier disciplina humana, incluyendo la cocina vegana.

Eliminar la «mitad» de los alimentos, lejos de ser un impedimento, es un estímulo a experimentar con nuevos ingredientes y especias más desconocidos, probar toda clase de combinaciones y descubrir sabores nuevos a los que quizá nunca hubieras llegado de otra forma. Para alguien con cierta inquietud culinaria, es una oportunidad mucho más un obstáculo. Además de comer de una forma saludable y acorde a unos valores éticos, también te diviertes.

Así que la próxima vez que te digan «no sabes lo que te pierdes», podrás devolver la misma frase… pero con la certeza de que, efectivamente, no saben lo que se pierden… y quizás nunca lo sepan.

Si te ha gustado este post te gustará conocer al vegano más sexy del mundo, un joven que construyó sus músculos con proteínas vegetales y el beicon de los vegetarianos y que a los carnívoros encanta.

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