Siempre resulta satisfactorio ver el antes y el después de objetos o incluso viviendas que están estropeadas y alguien dedica tiempo y esfuerzo en repararlos. Esta vez os traemos el proceso de reparación de una alfombra oriental de la mano de conradcourtney, usuario de imgur, que ha publicado, imagen a imagen, este largo y complicado trabajo.
Se trata de una alfombra de Saruk de los años 50, un tipo de alfombra persa, que fue mordida por un perro pequeño de los que están siempre nerviosos y temblando. Si nunca te habías planteado cómo se repara una alfombra, no pierdas detalle del proceso.
Así se ve la esquina rota de la alfombra por delante.
Y así es como se ve por detrás.
Comienza el trabajo de reparación.
Aquí vemos terminada la capa inferior de cordones verticales. Este tipo de alfombras tiene un base de dos capas de hilos paralelamente alineados, pero ligeramente desviadas, que intercalan un cordón más grueso, que es el primario u horizontal.
Esta es la capa superior de hilos verticales.
conradcourtney cuenta que con los años, ha encontrado una mejor manera de reparar las alfombras, con respecto a los métodos tradicionales. Probó muchas variaciones hasta encontrar una forma sorprendentemente fuerte de unir los hilos.
Aquí se puede observar el entramado de hilos horizontales. Tienen un diámetro dos veces mayor que los hilos verticales. Cada entramado gira de nuevo hacia la alfombra, creando así una estructura cerrada que no se desmoronará.
Llegados a este punto, el proceso se ve totalmente caótico… Hay que tener mucha paciencia y saber bien qué estás haciendo para no equivocarse entre tanto hilo.
Con los cordones horizontales se forman loopings por los que más adelante pasarán los cordones verticales para crear la superficie a cuadros que observamos en el resto de la alfombra.
Después de unir todo el entramado principal, más grueso, se continúa con un entramado secundario, más delgado, por encima y por debajo de las capas superior e inferior de cordones verticales. Esta técnica asegura ambos lados y crea una cuadrícula.
¡Ya está todo el entramado terminado!
Así se ve lo que antes era una maraña de hilos desordenados.
Este es el resultado de un complicado proceso de ir cruzando capas de hilos verticales y horizontales hasta que queden bien apretados para que la alfombra no vuelva a romperse.
Pero el proceso no termina aquí, por supuesto. Ahora es el turno de comenzar a trazar el diseño de la alfombra. Cada nudo funciona como un píxel de la televisión, combinándose con otros miles para crear el diseño único de cada alfombra. Esta alfombra en particular tiene un diseño simétrico, así que basta con copiar el patrón de otra esquina que no esté dañada.
Así se ve de cerca el proceso de colocar los hilos de colores para terminar de reparar la alfombra.
¡Terminado! Aunque todavía hay que recortar esos bordes.
Se ve mucho mejor tras el afeitado, desde luego.
Por último hay que recortar los hilos para crear un borde protector además de decorativo.
Así se ve la alfombra por debajo una vez recortados los flecos.
Y así se ve ya terminada por delante.
¿Qué os ha parecido el proceso? Personalmente, ¡complicado! Tantos hilos y tantos cruces entre ellos. Pero el resultado no se puede negar, es maravilloso.