Si bien hemos asistido a una ola de solidaridad desde que comenzara la pandemia, aún se siguen presentando situaciones que exacerban a la opinión pública.
La joven protagonista de nuestra historia se llama Elena Cañizares y es una estudiante de enfermería de Ciudad Real. El pasado 22 de noviembre, publicó en Twitter que sus compañeras de piso habrían intentado echarla tras contarles que estaba contagiada por coronavirus.
Su testimonio se ha viralizado hasta tal punto, que su historia ya acuña cientos de miles de ‘me gusta’ en Twitter. Además, la joven ha adquirido más de 60 mil seguidores en apenas 48 horas, seguramente conmovidos por su testimonio, en el que denunciaba la falta de empatía de sus compañeras de piso.
Me llaman un domingo por la mañana, soy positiva de covid, llevo 15 días sin estar con nadie más que mis compas de piso y mi novio, me voy a perder las prácticas, un examen, (mi novio tb)y mis compañeras me han echado del piso 🤞🏼🥰🤘🏼
— Elena Cañizares Aparicio (@elenacanizares_) November 22, 2020
Un apoyo masivo
Como decíamos, Elena ha hecho públicas las conversaciones con sus compañeras, a las que ella nombra como Rocío Piso y Ángela Compañera, así como lo que le decían en el grupo de WhatsApp. «Estás siendo egoísta. Tienes coche, con lo que puedes coger tus cosas e irte a casa de tus padres, para así no propagar nada«, le dijeron, ignorando que es ilegal moverte de tu domicilio habitual cuando se te notifica que has dado positivo. Además, se junta el hecho de que los padres de Elena son personas de riesgo, por lo que la joven no podría volver, aunque pudiera, al domicilio familiar.
Además, ante la negativa de prepararle la comida porque las otras jóvenes «tienen universidad y gimnasio«, la joven se ofreció a salir de su cuarto cuando no hubiera nadie, utilizando doble mascarilla y desinfectando todo cuanto tocara. Sin embargo, sus compañeras seguían espetándole que se marchara del piso.
Así, las muestras ánimo no tardaron en llegar. Una respuesta masiva de solidaridad que se ha materializado en mensajes de apoyo, memes y toda clase de opiniones respecto al tema. Sin embargo, Elena se ha visto obligada a retirar el hilo que lo empezó todo, ya que en él aparecían los nombres de sus compañeras de piso, las cuales están recibiendo un acoso masivo.
Chicos os tengo que pedir que por favor no insulteis a mis ex compañera ni las intenteis buscar, con que me hayáis apoyado es mas que suficiente, no quiero crear hate, solo queria denunciar la situacion :(((((
— Elena Cañizares Aparicio (@elenacanizares_) November 22, 2020
Oleada de memes
Además de las palabras de cariño, otro de los grandes protagonistas han sido los memes generados sobre el tema, a cada cuál más divertido:
Elena Cañizares camuflándose para que no la pillen en la cocina las compareñas pic.twitter.com/i8SYkOORZJ
— FRNA-19 (@fran_jalriq) November 22, 2020
Elena Cañizares de camino a la cocina a calentar el tupper de macarrones pic.twitter.com/XHld78TC55
— R4PTUR (@R4PTUR) November 23, 2020
Rocío Piso yendo a la cocina cuando esté Elena Cañizares para que no le pegue nada pic.twitter.com/6oXiOS8y4K
— Jesús (@bodyelectricx_) November 22, 2020
Elena Cañizares en su habitación esperando que una compareña le caliente el táper pic.twitter.com/J3jxrTHQuq
— A. Luna (@MrLuna90) November 22, 2020
No sabemos cómo terminará la historia, aunque una de las compañeras de piso ya ha amenazado con denunciarla por publicar su conversación en la red social. Sin embargo, los usuarios de Twitter también se han pronunciado sobre esto:
Te digo q hay delito de coacciones y amenazas
Delito de incumplimiento de cuarentena
Delito de incumplimiento de contrato con el agravante de acoso por enfermedad
Mételas un buen paquete a las 3— Florecita (@micorazonenflor) November 23, 2020
¿Qué debemos hacer si nos vemos en la misma situación?
Inmersos en la segunda ola de la pandemia, es muy probable que sucedan situaciones como la que han protagonizado Elena Cañizares y sus compañeras de piso. La joven contaba en Twitter que, debido a sus prácticas en enfermería, le habían hecho una prueba PCR y que el resultado había sido positivo.
Una PCR positiva requiere de un confinamiento total por parte de la persona afectada y también de las personas que convivan o que hayan mantenido contacto con ella en los días previos a dicha prueba. Así, el protocolo indica que se ha de permanecer en el domicilio por un periodo de 14 días, aunque el seguimiento y el alta serán siempre supervisados por un médico de atención primaria.
Además, las personas que hayan convivido con una persona infectada, deberían ser testadas por el sistema público de salud. Aunque diesen negativo, deberían seguir cumpliendo el tiempo de cuarentena correspondiente.