¿Te imaginas cultivar cacao en casa y poder fabricar tu propio chocolate? Suena bien y es más fácil de lo que crees.
Si eres uno de nuestros lectores residentes en Sudamerica que disfruta todo el año de un extraordinario clima tropical, apenas tendrás que preocuparte del cuidado. Para todos los demás, deberemos construir un invernadero en casa para controlar la temperatura y humedad. Tranquilo, es muy sencillo y La huertina de Toni te enseña a construir uno por muy poco dinero.
Lo mejor es comprar semillas germinadas a través de internet, llegan enseguida, hidratadas y envasadas al vacío.
Deberás regarlas dos veces al día con un pulverizador. Puedes poner un par de vasos con agua dentro para asegurarte que el nivel de humedad no cae, o las plantas morirán.
No coloques las plantas bajo la luz solar directa, el cacao crece a la sombra de otros árboles.
También puedes comprar una plantúla de cacao crecida, con lo que ahorrarás tiempo de espera y evitarás problemas de enfermedades y hongos.
Iremos transplantando nuestra plántula según su crecimiento hasta el año de edad, momento en el que estaremos listos para plantar en el suelo. Elegiremos una zona en semisombra al aire libre, o en nuestro invernadero, asegurándonos de proporcionarle una tierra muy rica en materia orgánica, profunda, algo arcillosa, con buen drenaje y topografía regular. Cuidaremos nuestra planta hasta que alcance el tamaño de un arbusto y dé fruto, entre los 5 y 6 años de edad. Este tiempo podremos salvarlo la comprar una planta de cacao ya crecida.
Aquí tienes más detalles acerca del crecimiento y cuidados durante estos años.
El árbol del cacao produce de 40 a 60 habas anuales, repartidas en dos cosechas, algunas menos si se cultiva en invernadero.
Hayas producido tus propias semillas o prefieras comprarlas secas, con un poco de paciencia podrás hacer tu propio chocolate en casa.
Necesitarás:
Con las semillas listas y peladas, es el momento de realizar nuestra formula de chocolate.
Para el chocolate con leche: Colocar 500 gr de pasta de las semillas al baño María, con media taza de azúcar y 630 ml leche, que añadiéremos poco a poco y sin dejar de remover, hasta que todo se integre y adquiera una buena textura. Después, colocaremos la mezcla en moldes para dejar que se enfríe a temperatura ambiente o en el frigorífico, usando papel de aluminio como cobertura.
Este artículo fue modificado el 7 enero, 2019 4:40 pm