Categorías Animales

El perro que adoptó a una zarigüeya que no se mueve de su espalda

Durante todo el tiempo que llevamos con vosotros, hemos condensado todos nuestros esfuerzos en crear conciencia sobre lo hermosa que es la naturaleza, y las cosas tan fascinantes que podemos encontrar dentro de ella.

Una de esas cosas es la especial relación que mantienen algunos animales con otros de una especie distinta a la suya, por muy difícil de creer que resulte. De hecho, puede que recordéis la entrañable historia de Todd, el zorro doméstico que fue rescatado y que piensa que es un perro debido a su magnífica integración y convivencia con dos labradores.

Hoy queríamos compartir con todos vosotros una historia que no solo nos ha conquistado a nosotros, sino a la red en general. Sus protagonistas son dos animales de especies muy diferentes que comparten algo en común: su amor y cariño de el uno hacia el otro.

Este es Pocho, una zarigüeya que se quedó huérfana de madre tras un atropello

Después de ser trasladado al veterinario, Pocho recibió atención médica y allí conoció a Hantu, un pastor blanco suizo con el que establecería unos grandes lazos de amistad y un amor incondicional

Hantu, que no tenía cachorros, y Poncho, que no tenía madre, se volvieron una pareja inseparable

Aún hoy, después de tanto tiempo, ambos amigos salen a dar su paseo rutinario por el bosque. Y aunque Poncho se ha convertido en una zarigüeya adulta, a Hantu le encanta llevarla sobre su lomo

Hantu y Poncho viven juntos en la reserva Rare Species Fund, desde donde pretenden ayudar a generar una mayor conciencia y apreciación colectiva por nuestra vida salvaje con historias tan hermosas como estas

Si os ha gustado esta entrañable historia, no dejes pasar la oportunidad de compartirla con todos tus contactos. A continuación te dejamos con un vídeo en el que podréis ver esta hermosa amistad en todo su esplendor:

Vía: MyrtleBeachSafari

Compartir