En esta época los resfriados están a la orden del día, por lo que cualquier precaución es poca. Si en vuestro caso, o en el de alguien de vuestros familiares, ya es demasiado tarde y la tos se ha convertido en algo más que en una latosa compañera, no os angustiéis porque hoy os traemos un remedio natural infalible que podréis preparar en casa en cuestión de minutos.
Y es que la tos, además de ser un fastidio para el que lo sufre y para los que están a su alrededor, dificulta considerablemente la concentración. Así pues, tolerarla durante el día puede tener un pase, pero no por la noche, sobre todo después de un duro día de trabajo.
Lo lógico es pensar que un jarabe es la solución perfecta, pero la mayoría tan solo suprime la transmisión de señales que emite el cerebro para causar la tos. Además, estos jarabes normalmente contienen codeína y dextrometorfano; los 2 ingredientes principales que nos ayudan a dormir y que causan efectos secundarios como somnolencia, dolor de cabeza y una rápida actividad cardíaca.
De este modo, y ante las escasas y poco efectivas opciones, te recomendamos utilizar el parche casero de miel y jengibre que te enseñaremos hoy. Este tratamiento puede ser utilizado tanto por niños como por adultos. Veamos lo que vais a necesitar:
El jengibre, al igual que la miel, es una excelente opción para el tratamiento de la tos, alivia dolores de garganta y la congestión del pecho. Os animo a que lo probéis y nos contéis cómo os ha funcionado.
Este artículo fue modificado el 5 noviembre, 2018 12:32 pm