Cuando decidimos adoptar un perro, hay que investigar sobre qué razas son las más adecuadas para convivir en un ambiente familiar. Y las familias que estén considerando adoptar un pastor alemán, definitivamente deberían pensárselo dos veces. Después de todo, sabemos que son buenos como perros policía, pero ¿cómo son en los ambientes familiares?
Los pastores alemanes pueden ser feroces, desobedientes y demasiado ásperos para tener cerca de tus hijos, por lo que si estabas pensando en adoptar un uno, deberías reconsiderarlo.
Y aquí están los 15 motivos de por qué los pastores alemanes son horribles como perros familiares:
Estos chicos nunca se toman tiempo para un descanso o simplemente para pasar el rato.
Nunca se están quietos y no podrás descansar ni disfrutar del entorno.
Incluso cuando son jóvenes.
Actúan como si estuvieran siempre de servicio.
No son de esos perros con los que uno se divierta.
Odian estar dentro de casa.
Especialmente si están cerca de un bebé.
No son nada amigables.
No saben lo que es la vida en familia. No tienen ni idea.
Acatar órdenes no es una opción para estos muchachos.
Son perros muy serios y siempre muestran una mirada y una actitud severa.
Olvídate de divertirte y de tener un perro al que le guste jugar.
Después de dejarte la nevera vacía irán a por tu vestuario.
Son realmente tensos.
¡Era broma! Los pastores alemanes son los perros perfectos para un ambiente familiar, convirtiéndose rápidamente en un miembro apreciado de cualquier hogar.
Este artículo fue modificado el 2 noviembre, 2018 3:00 pm