Ante la pandemia que estamos viviendo, puede que hayas empezado a notar ciertos síntomas que estén despertando tus sospechas al contagio por el SARS-CoV-2. Sin embargo, cabe recordar que estamos en plena temporada de alergia y la sintomatología entre ambas afecciones puede llevar a la confusión.
La buena noticia es que, según los expertos en alergología, esta primavera será de una intensidad leve-moderada para los alérgicos al polen. Esto se debe mayormente a la disminución de contaminación, propiciada a raíz las restricciones de movilidad y la paralización de la producción en muchos sectores.
Hoy veremos que ambas afecciones pueden distinguirse de una manera sencilla.
Como ya sabes, la tos seca es uno de los principales síntomas tanto de la alergia como del COVID-19. No obstante, el coronavirus, además de la tos, viene acompañado de un malestar general desde el comienzo, normalmente viene acompañado por fiebre moderada o intensa y la dificultad respiratoria va acentuándose con el paso de los días.
Por el contrario, cuando se trata de alergia la tos desaparece utilizando un broncodilatador. Además de esta, la alergia suele venir acompañada de otros síntomas, tales como el picor de ojos, lagrimeo y secreciones nasales líquidas. Así pues, conviene fijarse en la evolución del moco. En la alergia se mantiene constante, transparente y líquido, mientras que durante un resfriado estas secreciones se van haciendo cada vez más densas y tornando su color.
Además, en este enlace puedes conocer todos los síntomas propios del COVID-19.
El confinamiento en casa será de gran ayuda para paliar los síntomas, así como las lluvias y el descenso de la contaminación. No obstante, conviene tomar ciertas precauciones:
Además de reducir la exposición, si los síntomas alérgicos son fuertes conviene paliarlos con medicamentos de venta libre. Ni qué decir tiene que debes consultar antes con el alergólogo, quien te pondrá el tratamiento más adecuado según tu caso. No tomes nada por tu cuenta.
Entre los medicamentos de venta libre más comunes para paliar la sintomatología alérgica, encontramos:
No nos cansaremos de repetir que, primordialmente, es lo que debemos hacer cuando empezamos a notar síntomas alérgicos, sobre todo en los casos más severos. Los alergólogos pueden realizar pruebas para determinar a qué eres alérgico concretamente y poner un tratamiento específico, que a veces puede incluir medicamentos más fuertes que solo se pueden adquirir bajo prescripción médica.
Vía: Aarp