La fobia a los animales es de los trastornos más frecuentes. Se engloba dentro de los trastornos de ansiedad, es decir, tiene un componente biológico, una función adaptativa para la supervivencia, y también un componente cultural o aprendido. Y, como en todos los trastornos de ansiedad, la prevalencia es mayor en mujeres.
A lo largo de la historia ha habido animales que han supuesto una amenaza para nuestra vida. Por eso, tanto humanos como primates hemos evolucionado teniendo «cuidado con la bestia» y aprendiendo a identificar posibles peligros escondidos, como serpientes, arañas o grandes felinos.
En general, son dos las emociones básicas que se activan ante especies consideradas peligrosas: miedo y asco. Ambas tienen una función adaptativa, es decir, protegen al organismo: el miedo nos ayuda a huir en situaciones potencialmente peligrosas (cocodrilos, leones, osos) y el asco impide que nos contaminemos o enfermemos (ratas, insectos, parásitos).
Aunque de esta manera el miedo es completamente adaptativo, comienza a considerarse un problema clínico cuando escapa a nuestro control, es irracional y conlleva un gran malestar o interferencia con la vida diaria del paciente.
En este estudio, un grupo de científicos del Instituto Nacional de Salud Mental y de la Universidad Carolina, mostraron a un grupo de voluntarios de Facebook, en el que había más del doble de mujeres que de hombres, imágenes de 25 animales para medir la ansiedad, el miedo y el estrés que les causaban. Las imágenes estaban agrupadas en:
En relación a lo expuesto anteriormente, se tomaron medidas de miedo y de asco.
Usando las medidas de miedo y de asco, crearon este gráfico comparativo con todos los animales que fueron presentados.
Las arañas resultaron ser el animal más temido junto a las serpientes venenosas (viper) y también insectos como las avispas y las cucarachas, aunque éstas produjeron más asco que miedo.
Estos resultados concuerdan con las teorías que dicen que las fobias tienen un gran componente biológico y adaptativo, ya que son compartidos por gran parte de la población. Además, los animales más temidos son aquellos que pueden matar con veneno o infectarnos alguna enfermedad.
Así que la próxima vez que te sobresaltes ante un insecto, puedes argumentar que se tratan de tus instintos animales protegiéndote.
¿Esta el animal que más asco o miedo te da en la lista de Los 20 animales más raros del mundo?
Vía ecoosfera, artículo por La voz del muro